Es un placer entrevistar a mi amigo y compañero Agustín Callejas.
En primer lugar, me gustaría saber qué es para ti el entrenamiento personal y por qué lo has escogido como tu profesión y tu forma de vida. Y en segundo lugar, decirte que es otro gran placer compartir el espacio de trabajo cada día en


Agustín. Buenas Luis, lo primero, muchas gracias por contar conmigo para tu revista 😉 Para mí el entrenamiento personal no es ni más ni menos que un entrenamiento adaptado al 100% a la persona que lo va a realizar. Para ello ha de tener en cuenta por un lado cuáles son los objetivos deseados por la persona que lo solicite, y por otro sus características reales, en las que hay que tener en cuenta una gran cantidad de variables que van desde conocer su nivel real de condición física hasta sus hábitos de vida (alimentación, trabajo, horarios, nivel de estrés…). Yo personalmente aparte de entrenamientos personales hago bastantes más cosas, pero sí tengo que reconocer que es algo que me está gustando mucho, que me aporta y me realiza y con lo que cada vez me encuentro más a gusto.
Luis. ¿Qué beneficios crees que puede tener contar con un entrenador personal?
Agustín. Creo que son muchos los beneficios. Por un lado está el factor motivacional, ya que eres el principal protagonista, todo se debe adaptar a ti. Cuando una persona entrena sola, es normal que al poco tiempo se estanque, y este es otro de los beneficios. El entrenador debe ir modificando la exigencia de los entrenamientos conforme tu condición física va mejorando. Éste es un problema que aparece cuando buscamos un entrenador no cualificado, que no sabe planificar a corto, medio y largo plazo. Aparte el entrenador debe conocer tus gustos y diseñar sesiones divertidas, exigentes pero a la vez realistas. Otro gran beneficio es que los resultados se ven antes, y son mucho más medibles.
Luis. ¿Qué objetivos suelen perseguir tus clientes? ¿A qué le dan más importancia?
Agustín. Pues hay de todo. La gente busca sentirse bien. Lo más común es perder peso y mejorar la condición física a nivel general, pero hay muchos otros objetivos como ganar masa muscular, recuperarse de alguna lesión, prevenirlas, realizar un trabajo de compensación si realiza algún deporte específico, combatir efectos derivados de enfermedades como la diabetes, hipertensión…
La gente le da importancia al hecho de comprobar que de verdad lo que están haciendo está adaptado a ellos.
Agustín Callejas.
Luis. ¿Cómo ves el futuro del entrenamiento personal en España? ¿Y en Albacete?
Agustín. Tenemos un problema que todos conocemos, y es que hay mucha intrusión. Hay muchos «entrenadores» no cualificados, que ofrecen sesiones a precios muy bajos, con resultados inmediatos. Y lo peor es que ponen en riesgo la salud de quienes confían en ellos. Pero también es verdad que cada vez son más los que buscan guiarse por gente de verdad profesional, y dan mucha importancia a la formación real de quienes ofrecen sus servicios. Creo que es algo en auge y que en los próximos años, tanto en Albacete como a nivel nacional va a seguir creciendo, pero hace falta que se regule y se controle lo que hemos hablado anteriormente.

Luis. ¿Dónde crees que deberíamos centrarnos lo entrenadores para mejorar la calidad de nuestros servicios? ¿En qué nos deberíamos formar? ¿A qué le deberíamos prestar más atención?
Agustín. Creo que la clave está en no dejar de formarnos. El mundo de la actividad física y el deporte es algo que como sabes, está en continua evolución y tenemos que estar al día. También es importante tener sentido crítico, no copiar todo lo que veamos. Debemos obligarnos a dudar, a reflexionar, nunca pensar que tenemos la verdad absoluta.
Lo bonito de nuestra profesión es que podemos aprender de mucha gente, desde el mejor profesional hasta cualquier cliente que tengamos.
Y también debemos compartir, creo que es muy importante compartir experiencias, puntos de vista, opiniones…
Luis. ¿Crees que el precio de un entrenador personal va parejo con su valía, formación o profesionalidad?
Agustín. Eso ya no lo puedo contestar porque habrá de todo. Cada entrenador es libre de poner un precio que considere adecuado a su nivel de experiencia, de conocimientos, formación…
