El ejercicio físico aporta beneficios en muchas áreas de la salud en personas mayores:
En el sistema cardiovascular, en el aparato locomotor, en el plano psicológico, en la prevención de enfermedades de muchos tipos, como el cáncer, enfermedades cardiovasculares, osteoporosis, artrosis y artritis…
Por este motivo, y la larga lista de beneficios asociados (cada vez aparecen más ventajas y menos contraindicaciones si se realiza con prudencia y bajo la supervisión de un profesional), se hace necesario seguir entrenando y realizando actividad física, también en la tercera edad. Como comentamos en el libro de Hábitos saludables.
El programa de entrenamiento con personas mayores se centra en el trabajo de fuerza, equilibrio, coordinación y a fin de cuentas ejercicios funcionales con transferencia a las actividades de la vida diaria y cuyo objetivo es mejorar la calidad de vida de las personas. Este programa actualmente se conoce como entrenamiento multicomponente, ya que son diversas cualidades físicas y habilidades las que lo conforman.
El aumento del ejercicio, aunque provenga de actividades suaves como caminar o realizar las tareas domésticas, se transforma a través de nuestro aparato locomotor en un aumento de salud y se contagia a todo el organismo.
Y generalmente a mayor intensidad del ejercicio, mayores beneficios conseguiremos; siempre individualizando y teniendo en cuenta las características de cada cual.
En Septiembre comenzamos nuevo grupo, en Do Equilibrio
Entrenamiento centrado en:
- FUERZA
- POTENCIA
- AGILIDAD
- FLEXIBILIDAD
- PREVENCIÓN DE CAÍDAS
- COORDINACIÓN
- ACTIVIDADES LÚDICAS
- Y ACTIVIDAD FÍSICA Y SALUD EN GENERAL